Sin embargo, a medida que pasaban los días después del estreno, empecé a leer críticas bastante entusiastas de este Origen... y mi interés comenzó a reavivarse, la película original de Franklin J. Schaffner no era de mis favoritas, aunque he de reconocer que las poderosas imágenes que contenía sun final se me quedaron grabadas a fuego en la retina.
Por fin me he decidí hace unos días a darle una oportunidad, y he de reconocer que el resultado me ha sorprendido muy gratamente, lejos de ser la obra maestra que algunos quieren hacernos ver, El origen del planeta de los simios es un muy digno homenaje a la saga original, pese a que se pasa por el arco del triunfo algunos de los hechos contados en ésta, lo que hace que no cuadre perfectamente en la mitología creada alrededor de la historia, sin embargo los logros superan con creces estos defectillos, Rupert Wyatt ha dirigido con muy buen pulso un interesante alegato a favor de los derechos de los animales y de paso ha revitalizado la saga, de la que ya se prepara una nueva secuela.
Will Rodman (James Franco) es un brillante científico que está investigando con primates un virus creado artificialmente para intentar curar el Alzheimer que está destruyendo a su padre (inmenso John Lithgow), cuando cree haber tenido éxito, la chimpancé más prometedora enloquece y es abatida, Will descubre que únicamente trataba de protejer a su bebé y éste se lo lleva a su casa para cuidarlo, descubriendo que los efectos del virus han pasado a través de la madre y que César -nombre que dará al bebé chimpancé- desarrolla una extraordinaria inteligencia.No son un grupo de canis preparandose para la juerga.
Esperanzado por el éxito, Will inyecta el virus a su padre, el cual logra una espectacular recuperación, mientras tanto Cesar comienza a hacerse adulto y empieza a interesarse por el exterior. En un momento dado ocurre una confrontación que hace que César acabe en un centro para simios, donde podrá comprobar de primera mano la crueldad del ser humano. Mientras tanto el padre de Will empieza a recaer de nuevo, lo que hace que éste desarrolle una versión más virulenta del remedio que aumenta con mayor rapidez la inteligencia de los simios. Poco a poco César se hace el lider del grupo de simios con los que está encerrado y empieza a ansiar la libertad. Los acontecimientos se encaminan sin retorno a la tragedia.
La primera mitad de la película se desarrolla como un drama bastante intimista para lo que nos tienen acostumbrados los típicos blockbusters hollywoodienses, avanzando con reposada lentitud y desarrollando convenientemente todos los personajes y tramas para, en su segunda mitad empezar a acercarse más al clásico thriller de acción al que nos tienen acostumbrados los americanos, pero sin las grandes estridencias actuales, contando con unas secuencias de acción rodadas con pulso firme por el director, de una manera bastante clásica, mas cercana al cine de acción de los 80 / 90 que a las películas actuales, pero claro está con los avances en el campo de efectos especiales actuales, lo que da como resultado unas espléndidas secuencias apocalípticas bastante épicas en su desarrollo. Sin embargo pese a lo que pueda parecer esta es una película principalmente de actores y éstos en general se han tomado su trabajo mucho mas en serio de lo que es habitual para un film de estas características, lo cual redunda muy a favor de la calidad de éste, ya que al conseguir que empaticemos con ellos hace que nos interesemos mucho mas por los acontecimientos que se desarrollan.
James Franco compone el clásico personaje del científico con nobles intenciones pero cuyas investigaciones serán el detonante de terribles consecuencias, el chaval se confirma como uno de los más interesantes jóvenes actores del panorama actual, creando un personaje obsesionado por salvar a su padre de la terrible enfermedad que parece, pero que cuando descubre la capacidad intelectual de César lo trata con humanidad, como la persona que realmente demuestra ser el simio. John Lithgow, por su parte rehuye de la interpretación sobreactuada que podría dar lugar al interpretar al enfermo de alzehimer, siendo bastante emotivo en muchos momentos sin caer en la lagrima fácil, especialmente sobrecogedor es el momento en que rechaza que su hijo le siga tratando, aceptando su destino.
Freida Pinto, la actriz india que se dió a conocer con Slumdog Millionare (Danny Boyle, 2008) hace de novia del protagonista, teniendo un personaje que le impide aportar póco más que una cara bonita, pese a todo no desentona con el resto del reparto.
Pero los verdaderos protagonistas de la función son César (Andy Serkis) y el resto de los simios, creados íntegramente de forma digital, no dejan de "cantar" en ocasiones, pero la genial interpretacion de Serkis hace que enseguida nos olvidemos del efecto especial y que nos creamos que César está ahi, interactuando de forma totalmente convincente con el resto del reparto y ofreciéndonos una maravillosa composición de un personaje enteramente sintético.
El buen hacer de Serkis, combinado con los efectos creados por WETA hace que los simios provoquen mucha mas empatía que los humanos, consiguiendo que el espectador sufra con ellos y albergue la misma animosidad que éstos ante los crueles humanos que los maltratan, lo que provoca que en el excelentemente rodado clímax nos alegremos por su triunfo y que no sentamos pena ante el oscuro futuro que aguarda a la humanidad, infectada por el mismo virus que los simios, pero con efectos completamente diferentes y mucho más onerosos, lo que nos prepara para las siguientes secuelas que sin duda harán que se cierre el ciclo volviendo a la película original de Heston. Espero con impaciencia la conclusión de esta nueva saga, de lo más interesante que ha dado el cine comercial americano en el 2011.
PUNTUACIÓN EN EL MULÓMETRO: 8.5
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